5 minutos Un envase que piensa en el futuro
En una actualidad donde el 8% de las emisiones totales son causadas por el desperdicio alimentario, el envasado correcto de los alimentos se vuelve fundamental. Siempre teniendo en mente que la producción de dichos envases genere el menor impacto ambiental posible y que sus características les permitan conservar los alimentos durante más tiempo.
En este contexto, el ya conocido envase de cartón sigue destacando. Su excelente capacidad para preservar alimentos destaca por:
- Su forma permite optimizar el almacenaje, se puede apilar sin inconvenientes.
- Su capacidad de conservar y proteger el producto, debido a su envase multicapa envasado al vacío y aislado de la luz.
Sin embargo, el modelo de economía circular durante su producción también ha evolucionado y le ha hecho destacar, logrando:
- Utilizar en su producción materiales renovables.
- Obtener sus materias primas de forma responsable.
- Disminuir la generación de carbono en su proceso de fabricación.
- Reducir el desperdicio alimentario.
- Facilitar el almacenamiento a temperatura ambiente, sin generar gasto energético al refrigerar.
- Facilitar el proceso de reciclaje y reutilización.
Esto lo ha llevado a ganarse desde hace años el título de “el envase del futuro”. Sin embargo, para que su modelo de economía circular se complete todos somos indispensables, pues sin una correcta disposición nuestro envase no cumplirá su ciclo y acabará en los vertederos.
A partir de ahora, cada vez que abras un envase de cartón, piensa en toda la vida que tiene por delante.
Después de usarlo:
- Escurre el sobrante del producto.
- Enjuaga el envase con agua reutilizada.
- Escurre o seca al instante.
- Compacta.
- Coloca en una bolsa o bote de basura aparte.
- Llévalo a los centros de reciclaje.
Reutilicemos y reciclemos adecuadamente nuestros envases y hagamos que nuestro consumo sea cada vez más responsable hacia el planeta.
